jueves, 11 de junio de 2015

Catalina de Aragon ( Parte 1)

"La Esposa humilde y leal"



El 16 de Diciembre de 1485,en Alcala de Heneres nacía la ultima hija de los reyes católicos,destinada a ser la primera esposa de Enrique VIII

Educacion 

Isabel de Trastamarra había llegado al trono por destino de la vida,ya que su medio-hermano no tuvo descendencia legitima, y su hermano Alfonso había muerto joven,convirtiéndola a ella en princesa de asturias. llego al trono sin la preparación y educación adecuada de una gobernante, ni siquiera sabia latín que en esa época era el idioma de la diplomacia internacional y se haba visto obligada a aprender de adulta. De ahí en adelante el interés de la reina por la educación y el conocimiento y el auspicio al saber, la llevaron a un renacimiento general de los estudios clásicos en España y a la importancia de estudios extranjeros. Cuanto concierne a sus hijas decidió que tuvieran todas las ventajas que a ella le habían sido negadas 

Catalina de Aragon 

 En consecuencia, Catalina estudio no solo el misal y la biblia, si no también a los clásicos y como Prudencio y Juvenal, San Ambrosio, San Agustin, San Gregoriano,y los historiadores latinos.Termino hablando latín clásico con gran fluidez.Luego se pensó que debía tener conocimientos en lo civil  y canónico, así como como de heráldica y genealogía y el arte de los esfuerzos intelectuales,también se  cuidaron los dotes musicales, para el baile y el dibujo, las tradicionales esferas femeninas del renacimiento. Pero la reina Isabel también inculco a sus hijas otra tradición femenina internacional: El dominio de las destrezas domesticas, algo mas notable tal vez, ya que las que participaban se casarían con reyes y archiduques, no con comerciantes y agricultores. Se decía que la reina insistía en confeccionar todas las camisas del rey Fernando, Sin duda sus hijas aprendieron a coser, tejer y hornear pan: Catalina consideraba un deben y un derecho coser las camisas de su esposo.

Es realmente notable que la fidelidad conyugal haya sido otra características común de las princesas europeas descendientes de Isabel La Católica . No poseían la sangre caliente de las Tudor, quienes en varias ocasiones permitieron que el corazón o los apetitos físicos se impusieran al cerebro.

En cuanto a Fernando, su inteligencia y su habilidad para sobrevivir probablemente fueron sus mayores legados a Catalina. Había antecedentes de desequilibrio mental en la familia de Isabel. Esa tendencia se manifestaría tragicamente en una de las hermanas de Catalina, pero ella mantuvo los impulsos histéricos bajo estricto control; en el curso de todas sus tribulaciones conservo la solida cordura de Fernando,Catalina admiraba mucho a su padre; la constante hostilidad de Fernando hacia Francia, por ejemplo, eran una de las actitudes paternas que formaron su carácter.


Negociaciones Matrimoniales

Era de esperar que las alianzas matrimoniales planeadas por el rey Fernando para sus hijos reflejaban su interés por neutralizar, o mejor aun, rodear Francia. Las piezas fundamentales en estas piezas fundamentales en esta partida de ajedrez dinástico, con toda Europa como tablero, eran Borgoña y Austria. En 1477 sus casas se habían unido por el matrimonio de Maria de Borgoña con Maximiliano de Austria. El conveniente nacimiento de un hijo y una hija de esa pareja de Hamsburgo, de una edad que podría conciliarse con un príncipe o princesa de España, puso un al alcance de Fernando una jugada brillante. En agosto de 1496, tres años después de que Maximiliano fuera nombrado emperador,la hermana de Catalina, Juana, partió hacia la corte borgoñona para casarse con el archiduque Felipe de Austria; en abril del año siguiente, su hermano Juan se caso con la archiduquesa Margarita, que había sido llevada a España.
El primer matrimonio arreglado por el rey Fernando --el de su hija Isabel con su primo Don Alfonso de Portugal -- reflejaba otra preocupación permanente. Tal como Escocia para Inglaterra, así era Portugal para España; un vecino cuya proximidad geográfica lo convertía permanentemente en una aliado potencial para un enemigo potencial.


Juana de Catilla
Luego estaba Inglaterra, a primera vista, Inglaterra era una potencia menor en comparación con con el poderoso trió formado por España, Francia y el que llego hacer el imperio de los Habsburgo. No obstante, Inglaterra gozaba de ciertas ventajas naturales en todo juego diplomático o militar. Los mercantes españoles que deseaban llegar a Holanda, los mercantes borgoñones que se dirigían a España, necesitaban de los puertos ingleses si Francia estaba cerrada para ellos.

El verdadero problema  de un matrimonio real ingles, desde el punto de vista de Fernando, era la naturaleza inestable de la  nueva dinastía. En Agosto de 1485, Enrique de Lancaster se había establecido en el trono ingles como Enrique VII, el primer monarca Tudor.Fue el ultimo termino, un asenso a asegurado a punta de espada, que el esgrimió en Bosworth Fiel. Porque sin duda habían otros individuos con mas derecho dinásticos con mas derecho, no solo la muchacha con la que se caso Isabel hija de Eduardo IV, si no otros representantes de la Casa York.



Enrique VII
Las primeras tentativas para que se celebrara el matrimonio del hijo de Enrique, Arturo, Príncipe de Gales con la hija de Fernando, Catalina, probablemente comenzaron en 1487, cuando Arturo tenia dos años y Catalina no había cumplido dos. En apariencia, hubo un firme progreso. En abril de 1488 se le encomendó al doctor Rodrigo Gonzales de Puebla que redactara un tratado de matrimonio con los comisionados del rey ingles.

Hubo también un regocijo cortesano, en particular por la parte inglesa. En Julio,por ejemplo, Enrique VII felicitaba exageradamente a Fernando e Isabel por su ultimo éxito por los moros. Desde Londres, De Puebla escribió que el rey ingles estallo en un espontaneo " Te Deum Laudamus" cuando se toco el tema del matrimonio y la alianza.

La reacción Española fue un tanto mas fría. No entraba en planes políticos de Fernando, a casar a una de sus bien instruidas embajadoras con un miembro de "una familia que cualquier día podría ser expulsada de Inglaterra" según expreso el mismo con ironía.

No obstante, para Enrique VII , el matrimonio era lo suficiente valioso como para tragarse uno o dos insultos corteses. El posterior tratado de Medina  de Campo.en Marzo de 1489, fue su primer avance en términos de una alianza europea. Era esencial para Enrique que los pretendientes de la Casa York ya no obtuvieron refugio en suelo español, y tanto a Fernando como a Enrique los aliviaba estar unidos contra los franceses 
Arturo Tudor, Principe de Gales 
Catalina de Aragon tenia poco mas de tres años en la época de Medina del Campo, cuando estudiaba la historia de sus antepasados ingleses no aprendía oscuras leyendas si no elementos con los que forjarse un idea acerca de la cual podía ser su futuro como la Princesa de Gales.

Las negociaciones para el compromiso de la joven pareja no se iniciaron hasta finales de 1496, poco antes de que Catalina cumpliera once años.

En Enero de 1497,la joven infanta encomendó al doctor De Puebla que la representase en su compromiso.En consecuencia, el siguiente mes de Agosto, Arturo y Catalina se comprometieron oficialmente en Woodstock y De Puebla actuó en representación de Catalina.Pero a partir de ese momento a Catalina se le llamo oficialmente Princesa de Gales.


Princesa de Gales 

Una de las cuestiones molestas que planteaban los tratados matrimoniales entre jóvenes príncipes era cuando y en que etapa del desarrollo debía la princesa partir hacia el país de su futuro esposo.Eso,a su vez, se relacionaba con la entrega de la dote,algo siempre fastidioso, en especial para padres como Fernando de Aragon y Enrique VII.

Una serie de instrucciones sobre la vida de la corte inglesa fueron despachadas a la "Princesa de Gales" por su futura suegra y la mujer que era la reina madre en todo menos ne nombre. Margarita de Beaufort. Catalina tenia que aprender frances hablándolo con su cuñada la archiduquesa Margarita,para poder conversar en ese idioma cuando fuera a Inglaterra.
La petición siguiente era que Catalina se acostumbrara a beber vino "El agua de Inglaterra-- escribió Isabel de York -- no es potable y aunque lo fuera, el clima no permitiría beberla"
El domingo Pentecostes -- 19 de Mayo de 1499 se celebro las primeras ceremonias nupciales que unirían a Arturo y Catalina, a las nueve de la mañana después de misa, en el Bewdley Palace de Worscestershire. De Puebla obedeciendo las pautas de la época, representaba el papel de la novia; no solo tomo la mano derecha del príncipe y estuvo sentado a la derecha del rey en el banquete que siguió, si no también metió una pierna simbólica en la cama matrimonial real como establecía la ley.

Finalmente se convino, en el curso del año 1500, que Catalina debía viajar hacia Inglaterra poco después de su decimosexto cumpleaños. Pero la Familia Real Española durante ese ultimo año de la crucial adolescencia de Catalina, era muy de la confiada unidad en que ella había sido criada. Fernando e Isabel  habían sido golpeados por unas series de terribles tragedias personales, desastres familiares que destruyeron ademas la política europea de Fernando.

La primera fue la peor, en Octubre de 1497, el adorado hermano de Catalina, el infante Juan, murió tras una breve enfermedad, " Así decayó toda la esperanza de España", escribió Pedro Marir. 

Hubo otros contratiempos: un nuevo levantamiento moro amenazo la despedida de Fernando de su hija menor. Una de las ultimas paradas de Catalina, antes de embarcarse a La Coruña el 17 de Agosto, fue en Santiago de Compostela, donde paso la noche rezando en la capilla de San Jacobo. Pero sus oraciones no sirvieron para ahorrarle una vez abordo de la nave. Una Feroz tormenta en la bahía de Vizcaya la llevo de regreso a costas españolas. No fue hasta fines de Septiembre que Catalina  hacia una Inglaterra cada día mas impaciente por su llegada.
Después no faltarían cronista que afirmaban que el problemático futuro de Catalina había sido presagio de esos vientos inoportunos. Se dice que la propia Catalina comento, el resultado de la vista de su primer matrimonio, que " esa tempestad aseguraba alguna calamidad". Pero como las tormentas en la bahía de Vizcaya no constituía ninguna rareza, probablemente Catalina sufriera mas por la "fatiga provocada por ese mar furioso" como lo expreso Enrique VII, que por el peso de los presagios.



El segundo viaje no fue demasiado tranquilo pero al menos se completo. El 2 de Octubre de 1501 llego a Plymouth Sound la pequeña flota enviada a escoltar a la Princesa de Gales a Inglaterra.

"La princesa no habría sido recibida con mayor alegría si no hubiera sida la salvadora del mundo" escribió un miembro de el séquito español de Catalina. En cuanto escribió tierra firme, a pesar de su indisposición  y sin tiempo de cambiarse de ropa, Catalina pidió que la llevaran a una iglesia a dar gracias por haber llegado sano y salva.
Después de tantas demoras y frustraciones, la excitación del rey Enrique era comparable a la de los súbditos que animaba el corazón de Catalina en el trayecto con sus leales aclamaciones (aunque no entendía las palabras, podría apreciar la intención).


Apariencia 

¿Que aspecto tenia en realidad la Princesa de Gales? El rey Enrique tenia que ver con sus propios ojos a al esposa de su hijo, asegurarse que fuera saludable, núbil y preferiblemente bonita. El rey, que había solicitado que las damas españolas de Catalina también fueran beldades, no actuaba por media codicia de los ojos. La relación entre un buen aspecto y un buen carácter, como aquella a una apariencia saludable y fértil, era algo que en lo que en mayor medida todos creían por entonces.



Natalia Rodriguez como Catalina en la Serie Isabel 
Pero en Dogmersfield, las exclamaciones de éxtasis mutuo cesaron de manera repentina, porque se le dijo secretamente al rey que ni se le ocurriera examinar secretamente a Catalina. Como esposa castellana de noble cuna, Catalina se mantendría cubierta por un velo tanto para el esposo como para el suegro hasta que se hubiera pronunciado la solemne bendición de la ceremonia final. 
Hubo una momentánea desavenencia entre el monarca ingles y una formidable matriarca española llamada Doña Elvira Manuel, a quien la reina Isabel había enviado al cuidado de Catalina. El rey Enrique señalo que, dado que Catalina era su nuera, era en realidad una súbdita inglesa, de modo que las antiguas tradiciones castellanas carecían de importancia.
Al final la disputa se resolvió en favor del futuro ingles de Catalina en oposición a su pasado castellano.El velo se levanto, Catalina hizo una profunda reverencia en un gesto de simbólica obediencia al rey ingles.

No había habido ninguna treta. ningún disimulo, con una mezcla de alivio y deleite, que el rey pudo decir de Catalina: "Mucho admiro su belleza, así como sus modales agradables y dignos" El Príncipe de Gales, obedientemente,siguió el ejemplo. En su vida había sentido tanta alegría,que les escribió a sus padres políticos,unas semanas mas tarde, como cuando contemplo "el dulce rostro de su esposa".

Aun así se tiene en cuenta la exageración diplomática, no cabe duda de que Catalina , en vísperas de su decimosexto cumpleaños, poseía una belleza juvenil y fresca que encantaba a los observadores, solo a los miembros de la familia a la iba a formar parte. Sus mejillas rosadas y su piel blanca eran muy admiradas en una época que el maquillaje era muy torpe,descarado y estaba muy mal visto. Se pensaba que una tez como la de Catalina indicaba un temperamento mas sereno y alegre que la cetrina. Ademas, el cabello de Catalina era rubio y abundante, con reflejos rojizos y sus rasgos bonitos y regulares en un grato rostro ovalado.
Tomas Moro, ocho años mayor que Catalina, fueron uno de los que se burlaron de las escoltas españolas de la joven como " ridículos ....pigmeos etíopes, como diablos salidos del infierno" en verdadero estilo xenofobo ingles. Pero de Catalina escribió: Nada hace falta en ella que debería tener la muchacha mas bella" 
Catalina de Aragon 
Si su tez era su principal belleza, la principal desventaja de Catalina era su escasa estura. Toda la gracia de su porte, inculcada por muchos años en la corte castellana, no lograba disimular que era sumamente baja. Ademas era gordita, pero una grata redondez en la juventud era considerada saludable. En contraste la voz de Catalina era sorprendentemente grave y profunda para ser mujer y eso sin duda contribuía a la impresión de dignidad que daba a cada que la conocía y compensaba la falta de centímetros. 


Bibliografia 

Antonia Fraser; Las Seis Esposas de Enrique VIII